Santa Catalina, Santa Clara, Villa Clara, 18 de febrero del 2010, (FCP).La Convención sobre los Derechos de las Niñas y los Niños de las Naciones Unidas (ONU), proclama la defensa de estos como parte fundamental de la familia y la sociedad. Cuba es miembro de las Naciones Unidas desde el 24 de octubre del año 1945 y signataria de estos Derechos sobre la Infancia.
En un resumen realizado sobre lo expuesto en la Convección sobre los Derechos de las Niñas y los Niños se plantea que: "Estos tienen derecho a estar con su familia o con los que los cuiden mejor". Sin embargo la realidad cubana es que los estudiantes tienen que permanecer becados, fuera del hogar y del amparo familiar.
Contrario a lo aconsejado por el Papa Juan Pablo II en su visita a Santa Clara, Cuba, el 22 de enero del 1998, donde en su predicación instruyó: "Experiencias no siempre aceptadas y a veces traumáticas son la separación de los hijos y la sustitución del papel de los padres a causa de los estudios que se realizan lejos del hogar, edad de la adolescencia….".
Y continuó: "… en situaciones que dan por triste resultado la proliferación de la promiscuidad, el empobrecimiento ético, la vulgaridad, las relaciones prematrimoniales a temprana edad y el recurso fácil al aborto. Todo esto deja huellas negativas y profundas en la juventud… llamada a consolidar una sociedad mejor".
Según esta Convención: "Los niños tienen derecho a la educación gratuita, a hablar su propio idioma y practicar su propia religión y cultura". Sin embargo, aunque en Cuba la educación es gratuita, no se les permite el uso de artículos religiosos como son rosarios, crucifijos y biblias. Además de reemplazar a los padres como "primeros y principales educadores de sus hijos".
Planteaba el Papa que: "…en el ámbito educacional, a la autoridad pública le competen derechos y deberes, ya que tiene que servir al bien común… esto no les da derecho a sustituir a los padres. Por tanto, los padres, sin esperar que otros les reemplacen en lo que es su responsabilidad, deben poder escoger para sus hijos el estilo pedagógico, los contenidos éticos y cívicos…".
Proseguía: "…y la inspiración religiosa en que desean formarlos íntegramente. No esperen que todo les venga dado. Asuman su misión educativa, buscando y creando los espacios y medios adecuados en la sociedad civil". Para nadie es un secreto que los padres cubanos no tienen derecho a escoger la educación ni la escuela que desean para sus hijos.
Entre los Derechos de las Niñas y los Niños está el que: "No deben usarse a estos como mano de obra barata o como soldados". En esta isla este principio ha sido totalmente violado, pues los jóvenes de 16 años, fueron llamados al Servicio Militar Activo, con carácter obligatorio y llevados para Angola, Etiopía o Nicaragua a combatir, donde muchos perdieron la vida.
Las denominadas Escuelas en y al Campo, con régimen becado, en esta isla son modalidades de explotación infantil. En ellas se usa a los niños como mano de obra gratuita, bajo el pretexto de formación integral para la vida, donde tienen que laborar en pésimas condiciones con una alimentación escasa, mal elaborada y dormir en naves parecidas a barracones.
En estos internados campestres no son pocos los niños que han muerto producto de accidentes en el trabajo o descuidos de los responsables, amén de la promiscuidad, estupro y abusos lascivos del que han sido víctimas. Aunque el documento de las Naciones Unidas dice: "Los niños y las niñas tienen derechos a que se les mantenga sanos y salvos, sin explotación ni negligencia".
Entre los Derechos de los Niños y las Niñas de la Convención de la ONU está: "Tienen derecho a tener suficiente comida y agua limpia". Es conocido por todos, que en Cuba las escuelas becadas carecen de un menú adecuado, ya que son poco variados, el agua potable es bien escasa para tomar y generalmente no hay para bañarse.
Abundan enfermedades de la piel por la falta de higiene, vinculadas a ácaros y piojos. La falta de limpieza se observa en albergues y retretes, así como en el fregado de los utensilios de cocina, lo que conlleva a la transmisión de virosis, bacterias y hongos. Se atenta de esta forma contra el principio de la ONU sobre la niñez, que: "Los niños tienen derecho a un nivel de vida adecuado".
No hay comentarios:
Publicar un comentario