El Condado, Santa Clara, Villa Clara, 11 de febrero del 20l0. (FCP). Los días que precedieron a la conmemoración del Aniversario 157 del nacimiento de José Martí Pérez, Apóstol de la independencia cubana, se caracterizaron, por presentarse situaciones especiales. Un grupo de disidentes fueron detenidos arbitrariamente, que no es casual en un país, donde la libertad individual no está garantizada.
¿Qué buscaba la Policía Política con estas detenciones? ¿Acaso estos simples ciudadanos ponían en peligro la estabilidad del régimen, sin ni siquiera salir a las calles a manifestarse? ¿O se está en el umbral, el inicio de una nueva etapa, en que la fuerza bruta y la intolerancia comenzaran a determinar?
Lo ocurrido no encuentra explicación, que no puedan venerar al Apóstol, los hombres y mujeres luchadores por la dignidad humana. No obstante, el acoso y la persecución, se le rindió homenaje a Martí, en la vivienda de muchos opositores cubanos. La fecha fue la ocasión propicia, para llamar nuevamente a la unidad, como garantía del triunfo.
En los hogares de estos patriotas del Siglo XXI, se estudió su pensamiento, las ideas que lo enlazan con el momento actual. Provechosos fueron estos encuentros, donde en sus propias palabras el precursor de la guerra del año l895, puso al descubierto a quienes utilizan su nombre para esconder sus desafueros.
Escribió Martí: "Asesino alevoso, ingrato a Dios y enemigo de los hombres, es el que, so pretexto de dirigir las generaciones nuevas, les enseña un cúmulo aislado y absoluto de doctrinas, y les predica al oído, ante que la dulce plática de amor, el evangelio bárbaro del odio".
El marxismo-leninismo, teoría sobre la que descansa el poder político del castrismo, predica el odio de clases. La lucha a muerte contra los dueños de los medios de producción y la propiedad privada, alienta, como también promueve, la dictadura totalitaria, contra el resto de los sectores de la sociedad.
Es por eso, que el señor de la pupila insomne, llamó una y otra vez a los cubanos a La Guerra Necesaria. En una de esas veladas literarias, que efectuaban, los clubes patrióticos, manifestó: "No hay perdón para los actos de odio" y más adelante sentenció: "Los odiadores debieran ser declarados traidores a la república. El odio no construye".
"Honrar, honra", así predicaron desde el silencio de sus humildes moradas o desde sus solitarias mazmorras, miles de hijos de este terruño, que homenajearon al Apóstol en el 157 Aniversario de su nacimiento. Pero no fue un acto ritual, carente de sentido patriótico, al que tienen acostumbrado a este pueblo, las autoridades oficiales.
Pensamientos del Maestro, estuvieron presentes en cada una de las vigilias, que organizó la oposición como el siguiente: "El hombre que clama vale más que el que suplica: el que insiste hace pensar al que otorga". Estas ideas de Martí, constituyen fuente de inspiración, para los que frente a la represión defienden su ideario.
José Martí decía: "la libertad es el derecho que tiene todo hombre a ser honrado, a pensar y hablar sin hipocresía". Carlos Alberto Montaner, opositor exiliado manifestó: "…y a mí me parece que de los miles de apotegmas que Martí escribió a lo largo de su vida este es uno de los más exactos".
Y así transcurrió este nuevo aniversario, en medio de paradas y marchas estudiantiles, donde la participación era obligatoria. No faltaron los discursos grandilocuentes, donde se tergiversaban las ideas martianas. Mientras los verdaderos patriotas que luchan por la transición y el cambio lo honraban dignamente, al utilizar sus palabras sin miedo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario