Prisión “Nieves Morejón”, Guayos, Sancti Spíritus, 17 de septiembre del 2003(FDC). "Dime lo que presumes y te diré de lo que careces”, reza un viejo refrán que no por antiguo pierde vigencia y que como todo proverbio popular encierra una gran verdad. Donde la cotidianeidad de la vida se encarga de demostrar o no, si es adecuado al contexto cubano.
Hace algún tiempo cuando cayó en mis manos "Alma Mater", órgano informativo editado en mi país por la Federación Estudiantil Universitaria (FEU) y que se auto titula "La Voz de los Universitarios Cubanos". Me llamó la atención un artículo que bajo la firma de Mariela Valdivia López saca a la luz pública uno de los males que lastran, creo que a todo el sistema comunista.
¿Por que no reconocen las más altas autoridades de la nación?, esas mismas que alardean constantemente de la imparcialidad y la justeza de la Revolución, al tomar decisiones que pueden afectar de una forma u otra la vida de los ciudadanos cubanos.
La igualdad de oportunidades tan cacareada por los que gobiernan nuestro país según las capacidades del individuo, es un mito y si alguien piensa que tal afirmación no tiene validez por venir de un disidente, lo invito a que lea detenidamente la trascripción literal del mencionado trabajo periodístico. Salido de la pluma de una futura periodista oficialista.
Ella que solo por estudiar dicha profesión en Cuba, puedo asegurar que para nada puede acusársele de contrarrevolucionaria o desafecta, porque si así fuera no estaría en la Universidad, que dicho sea de paso, es otra prueba de que en Cuba no todos somos iguales a la hora de acceder a un alto centro de estudios docente, pues oficialmente: "La Universidad es solo para los revolucionarios".
Mariela Valdivia López intituló su revelador comentario ¿Arquímedes se equivocó? , que pone al descubierto una triste realidad, que para quienes vivimos en esta isla no es ningún secreto, pero que puede ser muy esclarecedor para los tontos útiles que aun creen que el nuestro, es el sistema más cercano a la perfección y a la justicia.
Esta, ya próxima a ejercer como comunicadora social, dice: "Cuando en la antigua Grecia el destacado filósofo Arquímedes expresó su teoría… Dame una palanca y un punto de apoyo y moveré el mundo… No imaginaba siquiera que más allá de una hipótesis investigativa, estaría hoy entre las costumbres más arraigadas de las personas en pleno siglo XXI"
No resulta extraño, por ejemplo, que en ocasiones exista una plaza laboral o de estudios, deseada por muchos y se privilegie a quienes no la merezcan, solo por el hecho "de ser hijo de papá”. Entonces fluyen las decepciones de quienes realmente estaban adecuadamente preparados y les frustraron las esperanzas.
Es apenas una de las situaciones que suceden muchas veces. Si los puntos de apoyos mencionados por Arquímedes, correspondían a lo importante que resulta la calidad estudiantil y porque no también la laboral. A lo mejor dejarían de darles sus empujoncitos facilistas, a quienes no tienen ni idea de que están engañándose a si mismo.
No son pocos los estudiantes o trabajadores mediocres a causa de la mencionada palanca. Tenemos entonces, al cabo del tiempo que se dan cuenta de cómo los demás se superan y ellos quedan en el camino. La solución para que esto no ocurra, está en parar a tiempo las sucias maniobras que tiran por la borda el esfuerzo intelectual, físico, artístico…
La diferencia entre esta repugnante maniobra y el fraude académico es nula, aunque se manifieste de otras formas, las secuelas son las mismas. Creo que si no escribe la frase que ponemos a continuación, no le publican el artículo "Para bien de nuestra sociedad existen personas que combaten este tipo de realidades y que han sentido la satisfacción de lograr con sus propios esfuerzos las notas propuestas"
“Queda mas que reflexionar, si vale la pena vivir un sueño ajeno y olvidar la ética profesional que tanto nos inculcan desde pequeños. Nadie puede tapar el sol con un dedo, pues la palanca dentro de la sociedad cubana existe y gana terreno. Por eso toca a todos enfrentarla, porque Arquímedes no se equivocó", concluye Mariela su acertado trabajo.
No, Arquímedes no se equivocó y en Cuba menos que en cualquier otro lugar. Su teoría esta presente en todas partes, hasta en los Hospitales muchas veces, donde se hace realidad ese otro refrán muy cubano, pero cierto que dice: " Quien tiene un amigo tiene un central azucarero"
En cuanto a la atención médica aunque publicitada como gratuita, que realmente es pública. No es la misma que se recibe, cuando se tiene a un galeno amigo dentro de un centro hospitalario.
Ese amigo es quien te puede abrir las puertas, que para otros estarían cerrados en determinados momentos y circunstancias.
Esa igualdad de que tanto presumen nuestros gobernantes es una falsía más, de las tantas con la cual engañan a muchos turistas que acuden a Cuba y a los extranjeros partidarios del Castrismo, que solidarios e inocentes nos visitan regularmente. Donde hay una palanca se acabó la igualdad y se frustran las ilusiones.
Hace algún tiempo cuando cayó en mis manos "Alma Mater", órgano informativo editado en mi país por la Federación Estudiantil Universitaria (FEU) y que se auto titula "La Voz de los Universitarios Cubanos". Me llamó la atención un artículo que bajo la firma de Mariela Valdivia López saca a la luz pública uno de los males que lastran, creo que a todo el sistema comunista.
¿Por que no reconocen las más altas autoridades de la nación?, esas mismas que alardean constantemente de la imparcialidad y la justeza de la Revolución, al tomar decisiones que pueden afectar de una forma u otra la vida de los ciudadanos cubanos.
La igualdad de oportunidades tan cacareada por los que gobiernan nuestro país según las capacidades del individuo, es un mito y si alguien piensa que tal afirmación no tiene validez por venir de un disidente, lo invito a que lea detenidamente la trascripción literal del mencionado trabajo periodístico. Salido de la pluma de una futura periodista oficialista.
Ella que solo por estudiar dicha profesión en Cuba, puedo asegurar que para nada puede acusársele de contrarrevolucionaria o desafecta, porque si así fuera no estaría en la Universidad, que dicho sea de paso, es otra prueba de que en Cuba no todos somos iguales a la hora de acceder a un alto centro de estudios docente, pues oficialmente: "La Universidad es solo para los revolucionarios".
Mariela Valdivia López intituló su revelador comentario ¿Arquímedes se equivocó? , que pone al descubierto una triste realidad, que para quienes vivimos en esta isla no es ningún secreto, pero que puede ser muy esclarecedor para los tontos útiles que aun creen que el nuestro, es el sistema más cercano a la perfección y a la justicia.
Esta, ya próxima a ejercer como comunicadora social, dice: "Cuando en la antigua Grecia el destacado filósofo Arquímedes expresó su teoría… Dame una palanca y un punto de apoyo y moveré el mundo… No imaginaba siquiera que más allá de una hipótesis investigativa, estaría hoy entre las costumbres más arraigadas de las personas en pleno siglo XXI"
No resulta extraño, por ejemplo, que en ocasiones exista una plaza laboral o de estudios, deseada por muchos y se privilegie a quienes no la merezcan, solo por el hecho "de ser hijo de papá”. Entonces fluyen las decepciones de quienes realmente estaban adecuadamente preparados y les frustraron las esperanzas.
Es apenas una de las situaciones que suceden muchas veces. Si los puntos de apoyos mencionados por Arquímedes, correspondían a lo importante que resulta la calidad estudiantil y porque no también la laboral. A lo mejor dejarían de darles sus empujoncitos facilistas, a quienes no tienen ni idea de que están engañándose a si mismo.
No son pocos los estudiantes o trabajadores mediocres a causa de la mencionada palanca. Tenemos entonces, al cabo del tiempo que se dan cuenta de cómo los demás se superan y ellos quedan en el camino. La solución para que esto no ocurra, está en parar a tiempo las sucias maniobras que tiran por la borda el esfuerzo intelectual, físico, artístico…
La diferencia entre esta repugnante maniobra y el fraude académico es nula, aunque se manifieste de otras formas, las secuelas son las mismas. Creo que si no escribe la frase que ponemos a continuación, no le publican el artículo "Para bien de nuestra sociedad existen personas que combaten este tipo de realidades y que han sentido la satisfacción de lograr con sus propios esfuerzos las notas propuestas"
“Queda mas que reflexionar, si vale la pena vivir un sueño ajeno y olvidar la ética profesional que tanto nos inculcan desde pequeños. Nadie puede tapar el sol con un dedo, pues la palanca dentro de la sociedad cubana existe y gana terreno. Por eso toca a todos enfrentarla, porque Arquímedes no se equivocó", concluye Mariela su acertado trabajo.
No, Arquímedes no se equivocó y en Cuba menos que en cualquier otro lugar. Su teoría esta presente en todas partes, hasta en los Hospitales muchas veces, donde se hace realidad ese otro refrán muy cubano, pero cierto que dice: " Quien tiene un amigo tiene un central azucarero"
En cuanto a la atención médica aunque publicitada como gratuita, que realmente es pública. No es la misma que se recibe, cuando se tiene a un galeno amigo dentro de un centro hospitalario.
Ese amigo es quien te puede abrir las puertas, que para otros estarían cerrados en determinados momentos y circunstancias.
Esa igualdad de que tanto presumen nuestros gobernantes es una falsía más, de las tantas con la cual engañan a muchos turistas que acuden a Cuba y a los extranjeros partidarios del Castrismo, que solidarios e inocentes nos visitan regularmente. Donde hay una palanca se acabó la igualdad y se frustran las ilusiones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario