jueves, 3 de diciembre de 2009

MOVIDOS POR UNA IDEA, Ramón Jiménez Arencibia.


El Condado, Santa Clara, Villa Clara, 26 de noviembre del 2009 (FDC). Las ideas cuando prenden en la conciencia de hombres y mujeres, se convierten en una fuerza real transformadora. De ahí la importancia que tiene este aspecto de la superestructura de la sociedad. Evidencia como el choque de formas diferentes de pensar, es el motor que impulsa la historia.

Existen en el rico historial cubano infinidad de ejemplos de la importancia de este factor en la lucha por la libertad y el progreso de la nación. Las guerras surgidas en el siglo XIX, agruparon a los contendientes en la misma, en torno a ideales muy bien definidos, además de ser estos contradictorios.

Los criollos, que ya se distinguían de los hispanos, encontraron su propia identidad como nación, en un marco hispano. España tenía poco que ofrecer a cambio de los altos impuestos que fijaba, una administración deficiente y virtual exclusión de los nativos de posiciones responsables en el gobierno de la isla.

Así los cubanos se alejaron de cualquier esperanza de reformas y se inclinaron hacia la independencia. Mientras que muchos consideraban a Cuba, como otra provincia de España y demandaban iguales derechos, además poseer representación. Otros deseaban una nación libre, soberana, como afirmaba Martí: “Con todos y para el bien de todos”.

Estas fuerzas con intereses heterogéneos, marchaban por senderos diametralmente opuestos. Unos consideraban que era posible obtener ciertos derechos dentro de la soberanía española, estos crearon el Partido Reformista. Los cuales resultaron victoriosos en las elecciones para la Junta de Información, que indicaba el deseo de los cubanos por las transformaciones.

Opuestos a estas posiciones estaban los que aspiraban a la separación de España. Los mismos se desilusionaron progresivamente de la política colonial y la falta de capacidad de ese país para gobernar Cuba. Surgieron las distintas Guerras de Independencia, por cientos de héroes y mártires fue abonado el camino.

Nuevamente las fuerzas de las ideas, llevó a los patriotas cubanos a empuñar las armas, para alcanzar la libertad. Fueron 30 años de una feroz y sangrienta lucha a muerte, para lograr hacer realidad los ideales de independencia y soberanía. A los líderes del 1868 y 1895, los movió esa gran idea.

Luego en la república, la traición a esos principios, que tuvo como base el caudillismo, inauguraron una época de frustración. La vida política de Cuba era efectivamente un triste espectáculo. El pueblo cubano no sentía respeto alguno por la política, ya que los electos no practicaban la lealtad a sus electores.

Deshonestidad en el manejo de los fondos públicos, latrocinio, corrupción, prevaricación, crimen organizado, caracterizaron aquella época. Otra vez las fuerzas democráticas se enfrentaron a los que nuevamente enterraban las esperanzas y anhelos de toda una nación. Se producía el choque inevitable entre estas corrientes, reflejo de intereses opuestos.

Fidel Castro Ruz, tenía el derecho casi indisputado de llenar el vacío que dejó el dictador Fulgencio Batista. Las otras organizaciones insurrecciónales, carecían de amplio apoyo popular, el ahora ex - presidente cubano, era el hombre del momento, El Nuevo Mesías. La atmósfera de tristeza que prevaleció, durante el batistato, se transformo en euforia y esperanza.

Aquel optimismo pronto desapareció. Comenzó el lento y doloroso camino hacia el Comunismo. Privaron de sus propiedades a los terratenientes, banqueros, comerciantes e industriales grandes y pequeños. Después cerraron los periódicos independientes del gobierno y también otros medios de comunicación.

Así mismo, persiguieron, encarcelaron, desterraron, estigmatizaron y fusilaron a quienes disentían. Los sindicatos, colegios profesionales, claustros universitarios que intentaron ser libres, cayeron ante los avatares totalitarios sin penas ni glorias.

Muchos son los grupos de derechos humanos, que se fortalecen a través de la isla. Las ideas del cambio y la transición pacífica ganan la conciencia de miles de ciudadanos. Se realizan incesantes gestiones para vertebrar un frente unido de oposición, que movidos por un interés común en cuanto a ideas, como se juntaron los Padres Fundadores, derrote a la tiranía castrista.

No hay comentarios:

Publicar un comentario